dimecres, 25 de març del 2015

PRESENCIA



Hay presencias en nuestras vidas que nos inspiran.
            Nos impulsan a aspirar a un ideal más elevado.
            Nos abren a la esperanza de una vida mejor.
            Nos dan la confianza de que es posible.
            Nos elevan, nos llevan a otro espacio de sentir y de ser.
            Amplían nuestra mirada.
            Son como la fragancia del jazmín.
            Nos envuelven de un perfume que da otro color a nuestra vida. Se lleva todo el aire viciado de los sentimientos encallados, y el corazón empieza a sentir la fragancia de la libertad.
            Son presencias luminosas.
            La pesadez se esfuma y aparece la luz, ilumina las estancias de tu alma, y se vuelve prioritario limpiarlas. Ves, reconoces y decides soltar.
            Vives la liviandad de ser libre, sin nada que te ate.
            Hay presencias que son como un fuerte viento: a su paso cambian el paisaje.
            Otras presencias, son como la brisa, son una caricia para el alma. Te hacen sentir amada, reconocida, respetada.


Miriam Subirana( El poder de nuestra presencia).

divendres, 6 de març del 2015

SOBRE EL MIEDO

Me niego a someterme al miedo que tira la alegría de mi libertad,
Que no me deja arriesgar nada,
Que me hace pequeño y mezquino,
Que no me deja ser directo y franco,
Que me persigue y que ocupa negativamente mi imaginación,
Que pinta siempre visiones sombrías.
Sin embargo no quiero levantar barreras por miedo del miedo.
Yo quiero vivir, y no quiero encerrarme,
No quiero ser amigable por miedo a ser sincero.
Quiero pisar firme porque estoy seguro y no por encubrir mi miedo.
Y cuando me callo, quiero hacerlo por amor
y no por temer las consecuencias de mis palabras.
No quiero creer en algo por miedo a no creer.
No quiero filosofar por miedo a que algo pueda tocarme muy cerca.
No quiero imponer algo a los otros, por miedo que puedan imponerme algo a mí.
Por miedo a equivocarme no quiero ser inactivo.
No quiero huir hacia lo viejo o inaceptable,
por miedo a no sentirme seguro en lo nuevo.
No quiero hacerme el importante porque tengo miedo a ser ignorado.
Por convicción y por Amor, quiero hacer lo que hago y dejar de hacer lo que dejo de hacer.
Del miedo quiero arrancar el dominio y dárselo al Amor.
Y quiero creer en el reino que existe en mí.

Autor: Rudolf Steiner.